Revista Platea Magazine
Raíces
El veredicto unánime de su generación consideró a Morfydd Owen una niña prodigio. Nacida el 1 de octubre de 1891 en Treforest (Gales), creció junto a sus hermanos mayores en las tiendas de cortinas de sus padres. Cuando este negocio estuvo lo suficientemente asentado, el padre lo dejó a cargo de su esposa para retomar la contabilidad y asumir nuevas responsabilidades como agente inmobiliario en Cardiff. Con tal implicación, la familia Owen alcanzó rápidamente la comodidad de las clases medias.
Aunque en la adolescencia Morfydd demostró una aptitud particular para los idiomas, desde bien pequeña quedó claro que había nacido con un talento especial para la música. Tuvo la suerte de ser hija de dos músicos aficionados que a los 4 años la acercaron a este arte a través del piano. Su padre tenía buena voz para cantar y disfrutaba componiendo; su madre también cantaba y era pianista, de ahí que Morfydd recibiera lecciones desde temprana edad.